admin En nuestra sociedad, es común escuchar a las personas adultas decirle a los niños/as “cuidado y te vas a caer” cuando están explorando y moviéndose libremente. Aunque esta advertencia puede parecer una forma de protección, ¿estamos realmente ayudando a los niños/as al limitar su movimiento y experiencia?
El movimiento libre es fundamental para el desarrollo físico, cognitivo y emocional de los niños/as. Cuando les permitimos moverse sin restricciones, están explorando su entorno, desarrollando habilidades motoras, tomando decisiones y aprendiendo a evaluar riesgos. Al decirles constantemente “cuidado”, les estamos transmitiendo miedo y limitando su capacidad para aprender y crecer.
Es importante recordar que los niños/as aprenden mejor a través de la experiencia. Cuando se caen o se hacen daño, están aprendiendo sobre el equilibrio, la coordinación y las consecuencias de sus acciones. Estas experiencias les permiten desarrollar habilidades de resiliencia y superar obstáculos en el futuro.
En lugar de limitar su movimiento, podemos fomentar un entorno seguro para que los niños/as exploren.
Además, como personas adultas, podemos ser modelos positivos al enfrentar nuestros propios miedos y desafíos. Si los niños/as nos ven asumir riesgos calculados y superar obstáculos, estarán más dispuestos/as a hacer lo mismo.
Resumiendo esto, en lugar de decirle constantemente a los niños “cuidado y te vas a caer”, debemos permitirles moverse libremente y aprender a través de la experiencia. Si todavía no nos sentimos muy seguros/as podemos cambiar estas frases por otras menos invasivas como: “atento/a a tus manos y pies”, “observa dónde puedes agarrarte”, “estoy aquí si me necesitas”. ✨🌈🌱
Confiemos en ellos/as, confiemos en el proceso y en su potencial. 💫
